Amparo Marco reclama un nuevo local para el comedor social del padre Ricardo con condiciones “más dignas” que el actual

La portavoz socialista en el Ayuntamiento de Castellón, Amparo Marco, ha instado hoy al equipo de gobierno a iniciar los estudios pertinentes para habilitar unas instalaciones “dignas” que sustituyan las ocupadas ahora por el comedor del padre Ricardo. “La grandísima labor social que desarrolla el padre Ricardo debe contar con un local en las debidas condiciones. Las actuales instalaciones son absolutamente inadecuadas para la cobertura asistencial que se presta, cada año, a miles de personas sin recursos”, añade.

Marco ha defendido la propuesta en el transcurso de la comisión plenaria de Desarrollo de la Ciudad que se ha celebrado hoy. La portavoz socialista mantuvo un encuentro con el padre Ricardo hace unas semanas para conocer a fondo las condiciones en las que se encuentra el comedor social, emplazado en las inmediaciones del antiguo cuartel del Tetuán, y se comprometió a defender la necesidad de unas instalaciones más adecuadas. A la reunión también asistieron los concejales Inmaculada Enguídanos y Joan Morales.

“El Ayuntamiento debe demostrar que está del lado de quienes peor lo están pasando. La crisis ha ampliado el número de las personas que precisan asistencia social y la Administración municipal tiene que situarlas en su prioridad máxima”, explica Marco. “El padre Ricardo es un referente de la solidaridad y el compromiso hacia los desfavorecidos. Castellón está en deuda permanente con este gran hombre y con su gran familia”, añade.

El comedor social está gestionado por la Obra Social de Integración del Marginado (OSIM), una organización benéfico-asistencial impulsada por el padre Ricardo hace 28 años para que ninguna persona se quede sin un plato caliente cada día. El padre Ricardo recordó a los concejales socialistas las dificultades que pasó la organización en sus orígenes para poder desarrollar su labor de protección y ayuda a los más necesitados. En algunos momentos, por falta de local se llegó a repartir el alimento al aire libre en el paseo de Ribalta, en pleno mes de diciembre.

La colaboración municipal permitió dotar a OSIM de un local estable para cumplir su fin social, pero el desarrollo urbanístico obligó a un traslado a las actuales dependencias, hace unos 15 años. Sin embargo, el local habilitado para comedor social resultó insuficiente desde su construcción para dar cobertura a la alta demanda. El edificio, de reducidas dimensiones, carece de sala de espera, de manera que los usuarios deben permanecer a la intemperie hasta la hora de comer. Las entrevistas con los peticionarios de ayuda también se realizan al aire libre.

El comedor de OSIM atiende a diario a unas 70 personas, aunque los fines de semana se llega al centenar de comensales. El centro ha establecido dos turnos de comida y después ofrece bolsas de alimentos para la cena, dada el complejo acceso al centro por la falta de alumbrado. De hecho, Marco abogó el lunes en otra comisión para que se solucionara el acceso al comedor, ya que se habían colocado señales de prohibido el paso en los dos caminos que llevan hasta las instalaciones.