Ramón Jesús Pérez, un ejemplo de superación

Ramón Jesús Pérez es un castellonense, hijo adoptivo de Burriana, que cuenta con la licenciatura de Derecho y forma parte del Colegio de Abogados de Castellón. Ha realizado un trabajo de investigación sobre la violencia de género, del que se publicará un libro y ahora está centrado en su Doctorado. Tareas que compatibiliza con la redacción de una columna en este medio digital, denominada “El Puntero”.

Se podría considerar un perfil común, si no fuera porque Ramón Jesús, sufre una parálisis cerebral desde que nació, que le imposibilita el movimiento así como la capacidad de hablar.

No obstante, eso no supone un impedimento para que Pérez pueda desarrollar su capacidad intelectual. Una tarea de la que se siente especialmente orgulloso, pese a las barreras humanas con las que se ha topado. “Las barreras que hay son la incomprensión y la envidia, pero aprendes a superarlas”.

En lo que respecta a las barreras materiales, las ha ido salvando gracias al apoyo incondicional de su familia y su imaginación. Un ejemplo de ello es la creación de una especie de casco con un puntero, mediante el que se ayuda para poder escribir por ordenador.

Su historia comenzó el día en que nació, momento en que detectaron una lesión en el cerebro, provocada por la falta de oxígeno. Un problema que le condicionaría para toda la vida, puesto que por ello se le ha diagnosticado una discapacidad del 95%. Tal y como el mismo explicaba, “mi dependencia es casi total, voy en silla eléctrica, que la manejo con la barbilla y me la he adaptado para ser más independiente; hasta hace poco vivía con mis padres, pero ahora vivo aquí en el Frater -Centro de Fraternidad cristiana de personas con discapacidad-, y estoy muy a gusto”.

Ramón Jesús Pérez describía así como se encuentra en su nueva faceta viviendo en el Frater. Se confiesa una persona activa y con muchas inquietudes y metas así como ambiciones. Sin embargo es conocedor de las necesidades que tienen las personas que se encuentran en una situación parecida a la de él, motivo por el que aprovechaba la ocasión para aconsejar a las familias con personas con discapacidad que “les den todo su apoyo. Si una persona tiene actitudes para algo, aunque sea discapacitada, que le ayuden”. En este sentido, Pérez se refería al apoyo que le han brindado sus padres. “Mis padres han sido dos pilares, han sido mis piernas, son dos personas maravillosas, al igual que el personal del Frater”.

Sin embargo, Ramón Jesús no podía eludir la situación respecto a las ayudas de diferentes organismos. Aunque las instituciones le han facilitado becas, éstas han tenido que ir de la mano con el trabajo de las familias, destacaba. “Hay organismos que me han ayudado. A mí me dieron una beca en Servicios Sociales pero mi padre tenía que llevarme, ponerme al ordenador…”

Hay diversos colectivos en la provincia de Castellón dedicados al estudio y cuidado de personas que sufren algún tipo de discapacidad, física o intelectual. Éstas fueron para Ramón Jesús unas herramientas para su crecimiento personal e intelectual. Un primer paso que, afirmaba, le abrió las puertas y le facilitó las cosas para que pudiera iniciar unos estudios. “Bueno, yo conocí una asociación, me integré en ella, me di cuenta que podía aprender. Me saqué el graduado, y me propusieron hacer el acceso a mayores de 25 años. Al mismo tiempo me integré en una Comisión de otra Asociación para escalar “posiciones”; pero como siempre era sincero y un “antisistema” me echaron, y después de 15 años creo que fue lo mejor. Continué estudiando, dejé mis aficiones: las motos, la música el baloncesto, y todo mi tiempo era para estudiar; mis padres y el Frater me han ayudado mucho”.

No obstante, tras los estudios están las ambiciones y las metas profesionales. Pérez, tenía intención de colegiarse, así como de encontrar un trabajo. Dos metas que no han sido fáciles, recalcaba. “Cuando terminé, tuve problemas para entrar en el Colegio de Abogados de Castellón, y gracias al CERMI y a Carlos Laguna conseguí que me admitieran. He intentado buscar trabajo, hasta que un sábado viendo Informe Semanal, salió un reportaje sobre violencia de género, y se me ocurrió hacer un trabajo de investigación. Ya lo he terminado y próximamente saldrá publicado en una revista digital, y además saldrá en libro”.

Para Ramón Jesús, los objetivos nunca finalizan. En la actualidad se encuentra inmerso en sus estudios de Doctorado, dado que su principal meta es dedicarse a la investigación. Unas metas que nunca olvida, puede alcanzar gracias a los suyos. “No quiero terminar sin agradecer a mis padres, a mis hermanos y a los cuidadores y profesores del Frater, todo lo que han hecho y hacen por mí”.