Alberto Fabra solicita una reunión con la secretaria de Estado de Infraestructuras para consensuar el trazado de la N-340
El alcalde de Castellón, Alberto Fabra, ha solicitado esta misma mañana una reunión con la secretaria de Estado de Infraestructuras, Josefina Cruz, con la que se acordó dejar sobre la mesa el trazado de Castellón norte hasta la variante de Oropesa de la N-340 con el fin de buscar un acuerdo de consenso que se materialice en este encuentro entre todas las partes. Así lo ha confirmado esta mañana el vicealcalde, Javier Moliner, quien también ha anunciado que el grupo municipal del PP presentará una declaración institucional en el próximo pleno en la que se acuerda “solicitar al Ministerio de Fomento que anule el trazado seleccionado para la variante de la N-340 a su paso por Benicàssim y se paralice el contrato de redacción del proyecto de obra con dicho trazado y pedir al Ministerio que inicie el proceso de negociación con el consistorio de Castellón para buscar una alternativa al trazado que no perjudique el paraje natural de la Magdalena”.
El vicealcalde ha confirmado la disposición del consistorio al diálogo y el consenso “porque es necesario, posible y justo. Lo que no es necesario ni posible es que de forma unilateral y sin consultarlo con nadie se licite este vial de esta forma”. Moliner ha insistido en la necesidad de que no se siga adelante con la redacción del proyecto que afectaría a la Magdalena y que se constituya una mesa de trabajo para alcanzar ese consenso.
El vicealcalde ha explicado que la opción del equipo de gobierno es que se duplique la actual carretera y ha insistido en que esta propuesta no retrasará este vial porque ya se contempla en el PGOU y ya se ha realizado la declaración de impacto ambiental. Además, Javier Moliner ha resaltado que resulta paradójico que el PSOE acuse de retrasos al PP cuando el Gobierno Central se ha pasado cuatro años sin aportar ninguna solución a este asunto. “Hace dos años, los socialistas afirmaron que no se licitaba porque no había consenso pero lo que verdaderamente creían es que si lo hacían esto supondría un desgaste electoral ya que el trazado pasa junto al ermitorio de la Magdalena y ahora, dos días después de las elecciones y sin consenso, se licita la obra”, ha denunciado el vicealcalde de Castellón.
“Ellos querían imponer un trazado que sabían que iba a ser rechazado por todos los castellonenses porque afecta a uno de los símbolos más importantes para los ciudadanos como es la ermita de la Magdalena”, ha afirmado Moliner. “Es fundamental preservar y salvaguardar la ermita y el paraje de la Magdalena y esta decisión unilateral del Ministerio de Fomento supone un menoscabo de la riqueza patrimonial y natural de la ciudad de Castellón”, ha finalizado el vicealcalde.
