Isonomía apoya a las personas con diversidad funcional en el día internacional de las personas con discapacidad
En este sentido, el pasado domingo 29 de noviembre, en colaboración con la Asociación Diversidad Funcional Universitaria (ADFU), organizó la III edición de la Marcha no competitiva para la igualdad de oportunidades de las personas con diversidad funcional. "Todas las personas somos diferentes. Todas las personas somos iguales".
Alrededor de 400 personas realizaron el recorrido por las calles de Castellón, tras el cual representantes de todas las diversidades funcionales conocidas –física, psíquica, sensorial y enfermedad mental- procedieron a la lectura del manifiesto en el que se reivindicó la correcta implementación de la LEY 39/2006, de 14 de diciembre, de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia. Asimismo, se hizo referencia a la situación actual de crisis que, para algunos colectivos, como las personas con discapacidad es permanente. Un ejemplo es el paro que no cesa de crecer y que para las personas con algún tipo de deficiencia se agudiza todavía más. En la provincia de Castellón el 70% de las 25.000 personas con diversidad funcional en edad laboral está parada. Muchos empresarios, cuando una persona en silla de ruedas, con muletas, con bastón blanco, o que saluda sin palabras, o alguien con alguna diversidad funcional intelectual o mental leve, entra por la puerta para pedir trabajo, solo ven la silla de ruedas, las muletas, el bastón blanco, el silencio o los rasgos de esa persona, y no se molestan en averiguar las capacidades que puede tener.
El Grupo de Investigación, Análisis y Trabajo sobre Discapacidad quiere señalar que es necesario cambiar el concepto que tiene la sociedad sobre las personas con diversidad funcional, empezando por las propias personas implicadas y siguiendo por la familia, tutores y tutoras, amistades, medios de comunicación, personal político y administrativo, etc. Todos y todas somos personas capaces de realizar muchas cosas, pero cada una a su ritmo y con los productos de apoyo y adaptaciones que sean necesarias. Solo si el conjunto de la sociedad no pone barreras físicas y sociales, las personas con discapacidad serán ciudadanas y ciudadanos con plenos derechos.
Tal y como se manifestó en la Marcha: "Todas las personas somos diferentes. Todas las personas somos iguales".
