Amparo Marco incide en que el gran objetivo del nuevo PGOU es reforzar la capitalidad de Castellón
La portavoz socialista de Castellón asegura que “una propuesta de regeneración urbana progresista debe condenar la especulación y la degradación del territorio”
Los socialistas de Castellón afrontarán el proceso de redacción del nuevo Plan General de Ordenación Urbana “con la idea de reforzar la capitalidad”. “El planeamiento urbanístico del año 2000 fracasó en su intento de convertir Castellón en un polo de dinamización social, económica y cultural. Ahora tenemos la oportunidad de sentar las bases de un nuevo proyecto que refuerce la centralidad de Castellón, tanto en el ámbito comarcal como en el provincial”, señala la portavoz del grupo municipal socialista, Amparo Marco.
Las propuestas que plantearán los socialistas irán encaminadas, precisamente, a afrontar los cambios urbanísticos necesarios para impulsar la capitalidad. A juicio de Marco, el gran debate pendiente en ese ámbito es el del transporte interurbano. “Las promesas del Partido Popular por instaurar una red de trolebús metropolitano han acabado convertidas en humo mediático, en un nuevo engaño a los castellonenses”, afirma.
Marco reivindica una nueva estrategia urbanística para la capital de la Plana, ante la crisis política y administrativa que ha deparado la anulación del PGOU por el Tribunal Supremo. “La parálisis del sector inmobiliario, a causa de la crisis económica y, también, del desgobierno municipal, permite abrir un debate social sobre el nuevo modelo de crecimiento urbano que precisa Castellón para los próximas décadas”, indica.
La dirigente socialista remarca la necesidad de “afrontar una revisión del planeamiento ambiciosa, que permita definir el desarrollo equilibrado, racional y sostenible”. En ese sentido, destaca que la participación del PSPV-PSOE en el debate urbanístico que ahora se abre irá en la línea de establecer consensos a largo plazo entre los diferentes actores políticos, sociales y económicos. Sin embargo, advierte que “una propuesta de regeneración urbana progresista debe condenar la especulación y la degradación del territorio”, como es el caso de la Ciudad de las Lenguas que promueven Fabra y Bataller.
