Sant Gregori Golf presenta una demanda para anular el Pleno

La empresa Golf Sant Gregori ha anunciado que va a presentar una demanda para anular el pleno celebrado ayer en el Ayuntamiento de Burriana en el que se decidió rescindir su condición de agente urbanizador. Por otro lado, su departamento jurídico ya dispone de un anteproyecto de medidas con las medidas legales a tomar para defender sus interés y los de los propietarios en caso de que esta anulación del pleno no sea aceptada por el Ayuntamiento.

Los motivos para esta solicitud de anulación se basan por un lado en la negativa por parte del consistorio a la hora de facilitar a la mercantil el informe externo contratado por el Ayuntamiento y sobre el que se ha basado la decisión de éste para rescindir el contrato. Por otro lado, Sant Gregori Golf presentó por registro una recusación a tres concejales que tenían que votar en el pleno en cuestión. Esta recusación no se tramitó cuando sí que se tenía que haber tramitado antes del pleno.

Desde la empresa no se entienden las prisas por tomar una decisión que legalmente puede esperar hasta el 25 de Junio, lo que daría tiempo a concretar los avances, que el propio Ayuntamiento conoce, en la búsqueda del inversor que darían la viabilidad del Proyecto.

En esta misma línea, 40 propietarios del PAI presentaron también ayer en el registro municipal antes del Pleno, la solicitud de esperar a dilatar la decisión hasta el final de su plazo legal.

Cabe recordar que la empresa ya presentó un informe técnico en el mes de Septiembre de 2015 en el que se argumentaba que la decisión de la rescisión supone un retraso de unos 10 años en el PAI, lo cual abocaría probablemente a la imposibilidad de su ejecución.

Para la empresa, “tomar la decisión de rescindir el contrato con el agente urbanizador echándole todas las culpas es muy cruel, ya que éste ha trabajado intensamente durante los primeros 11 años en avanzar el PAI, que sólo terminó su tramitación administrativa en Noviembre de 2011 después de las innumerables trabas que tuvo que soportar por gobiernos anteriores y por los técnicos municipales. A partir de entonces, de 2011 a 2016, ha sido la crisis la única causante de no poder dar continuidad al Proyecto, crisis que también afecta a propietarios y al propio Ayuntamiento”.