El ex presidente Francisco Vicent dice no entender nada después del comunicado de CIBUR anunciando que le expulsan del partido

El ex presidente de Ciutadans Independents per Burriana (CIBUR), Francisco Vicent, ha querido contestar al comunicado emitido por el partido esta mañana, en el que han anunciado que le echan del partido, señalando que desconoce a que se refieren cuando hablan de declaraciones efectuadas en diversos ámbitos y de las irregularidades administrativas detectadas en su gestión. “Realmente no lo puedo entender”. “Hace quince días, ha manifestado, presenté mi dimisión como presidente del partido por falta de ilusión y confianza. A partir de ahí, sinceramente, creo que han perdido el oremus. Es más, el pronunciamiento lo hacen a través de una ejecutiva que hasta la fecha no ha existido, pues el partido, básicamente, lo hemos gestionado yo y Mariola Aguilera, como todo el mundo sabe. Hay gente en la nueva ejecutiva que hace tres años que no acudía a ninguna reunión”.

Vicent ha indicado que está tranquilo “porque en este pueblo todos nos conocemos y a cierta edad uno ya posee una trayectoria personal que lo avala”. No obstante, ha insistido en que no sale de su asombro, pues lo último que se esperaba era un comunicado de esta índole, “que sinceramente no entiendo, pero a la vista de lo que ha pasado, me reafirmo en que la decisión que tomé hoy hace quince días fue muy acertada”.

Cabe recordar que Francisco Vicent era militante del Partido Popular y abandonó esta formación política, junto a la ex concejala popular Mariola Aguilera, para fundar en la primavera de 2007 Ciutadans Independents per Burriana. En las últimas elecciones celebradas el 27 de mayo de 2007 obtuvieron 991 votos, con un respaldo del 6,35 %, tras una intensa campaña electoral en la que invirtieron muchas horas y recursos. CIBUR perdió la posibilidad de ser decisivo en la conformación del gobierno municipal tras revalidar el PP la mayoría absoluta por tan sólo 9 votos, que fueron los que le faltaron al Bloc para alcanzar la barrera del 5 % de los votos válidos, lo que les excluyó de la aplicación de la regla d’Hont, perdiendo de este modo el concejal que poseían.