Muchas risas y misterio en el sainet de Don Bosco “El robo de la cacaixa”

Tras las fiestas navideñas, nuevamente el mundo fallero ha retomado la agenda de eventos con la representación de los sainets para el concurso de teatro en valenciano.

En esta ocasión ha sido el turno de la Falla Don Bosco con la interpretación de una obra denominada “El robo de la cacaixa” que se interpreta en el Centro Municipal de Cultura La Mercè a lo largo de todo el fin de semana.

El juego de iluminación pensado por el creador de la historia Juanvi Planelles, ayudado en la dirección por Juan Emilio Jumbau, ha sido uno de los muchos puntos de inflexión en una obra marcada por la originalidad y la elocuencia de sus personajes.

Concretamente Pere y Rosa, interpretados por Carlos Cano y Carolina Mataix, son el matrimonio que centra la trama argumental.

Una herencia, por parte de la familia de Rosa, provoca que el joven matrimonio cuente con una jugosa herencia. A pesar de lo “agarrado” que es Pere y la “poca cultura” de Rosa, por su nuevo status social deciden contratar a un mayordomo interpretado por Francisco Barruguer y dos criadas, interpretadas por Carmen Melchor y Marta Latorre.

Concretamente, el día que llegan los criados, una gran tormenta sorprende al matrimonio, que además contó con la visita de Vero “la sobrina pija”, interpretada por Bibiana Hidalgo, así como también cuenta con la visita de “Panxet” el hermano de Rosa, papel que representa Emilio Dávila.

Un fallo en la luz debido a la tormenta marca la pauta de la obra ya que un familiar de las criadas, “Tio” Aladroc, un ladrón retirado, aprovecha esa situación para tramar el robo de la caja fuerte. Sin embargo Panxet, gran aficionado al juego de adivinar películas, se convierte en un detective improvisado que tratará de averiguar quién es el ladrón.