Burriana ahorrará más del 75% del gasto energético con la nueva iluminación navideña

El Ayuntamiento de Burriana reducirá la factura energética de las luces de Navidad con la sustitución de los arquillos de bombilla tradicional por un sistema de tubiluz o cordón lumínico que, de forma experimental, se han instalado ya en distintos puntos de la ciudad, como la calle Mayor o el Camí d’Onda. Este nuevo soporte lumínico consume hasta un 75 % menos de electricidad que las tradicionales bombillas de filamento incandescente.

Los alumnos del módulo de electricidad de l’Escola Taller l’Axiamo contribuyen a este ahorro energético con la confección de arquillos y siluetas de belenes y árboles de tubiluz, así como otras estructuras iluminadas con diodos ‘led’, que consumen entre un 20 y un 30% menos de energía que el sistema de cordón lumínico. El alcalde, José Ramón Calpe; la concejala de Políticas Activas de Empleo, Ana Montagut; el edil de Via Pública, Pedro Sancerni y el concejal de Medio Ambiente y Nuevas Tecnologías, Juan Granell, se han acercado hoy hasta l’Escola Taller para conocer de cerca el trabajo de los alumnos, que servirá para decorar con motivos navideños diversos emplazamientos de la ciudad a los que no llega la iluminación navideña tradicional, como el barrio de Quarts de Calatrava o los poblados marítimos.

El director de la escuela, Ignacio Vicent y los profesores han explicado en qué consiste la labor de los alumnos y han mostrado a la delegación municipal el proceso de confección de estas estructuras lumínicas y su resultado final.

Los ediles han felicitado a los alumnos y profesores por su trabajo, así como a los que dan forma a las figuras de cartón piedra que completarán los belenes a tamaño natural, que se ubicarán en la Plaza Mayor y en los poblados marítimos. Los alumnos de este módulo también trabajan en la producción de escudos de la ciudad en escayola, a los que se da un acabado que simula un metal envejecido y que utilizará el Ayuntamiento como obsequio para sus compromisos.

Burriana inició en 1996 el itinerario formativo extraescolar con la puesta en marcha de la primera casa de oficios. Ahora, con varios proyectos de escuela taller avalados cada dos años por la Generalitat Valenciana, la ciudad ofrece la posibilidad a estos jóvenes no sólo de formarse en un oficio, sino también en conseguir el graduado en ESO.

Los alumnos reciben una beca durante los seis primeros meses y, a partir de ese momento, pasan a ser alumnos-trabajadores del Ayuntamiento, con una remuneración del 75% del salario mínimo interprofesional. La mayoría de ellos, en las pasadas ediciones, ha encontrado trabajo incluso antes de haber finalizado el ciclo. El Ayuntamiento pone a su disposición el asesoramiento y acompañamiento laboral a través de la Agencia de Empleo y Desarrollo Local, una vez terminada su formación en la escuela taller.