La falla Club 53 se lleva el máximo galardón de la Batalla de Flores
Un total de once carrozas competían por los ocho premios otorgados
En la tarde del domingo, la ciudad de Burriana se llenaba de colores con motivo de la Batalla de Flores. Después de más de una semana de fiestas, la cabalgata daba fin a las fiestas de la Misericordia de este año 2008.
El desfile lo abrió la Banda Musical Filarmónica de Burriana, que daba paso a la carroza que presidía la Reina Fallera de la ciudad, Beatriz González Olivas acompañada por la corte de honor y las damas de la ciudad. Tras ellas, desfilaba María Franch Guardino, Reina Fallera Infantil y las diez niñas que forman su corte de honor.
La tercera carroza estaba compuesta por las tres provincias. Inés Quesada García, Bellea del Foc, acompañada por Lidia Bernabéu y Beatriz Cutillas, dos de sus damas, Gloria Martínez Amigó, Fallera Mayor de Valencia, y Laia Bacas Casanova, Reina de las fiestas de la Magdalena.
Un total de once carrozas de las dieciocho comisiones falleras entraron en concurso. El primer premio se lo llevó la falla Club 53, que presentó una espectacular carroza con motivos del mar. El segundo premio cayó sobre la comisión del Barrio Valencia, quienes se inspiraron en el mundo oriental para realizar una preciosa carroza. La falla la Mota consiguió un merecido tercer premio con una carroza inspirada en el mundo flamenco.
La falla la Bosca obtuvo el cuarto premio, seguida de la falla Barrio San Blas, la falla Plaza Chicharro, Don Bosco y la falla San José.
También las fiestas del puerto de Burriana con sus representantes quisieron estar presentes.
Aunque ha pasado desapercibido, este año se cumplen cincuenta años de la celebración de la primera Batalla de Flores en septiembre de 1958. Una fiesta que creó e ideó el entonces presidente de la Junta Local Fallera, Ramón Boix, a quien la ciudad debería dedicar un homenaje en estas bodas de oro.
Tras la supresión en 1956 de los festejos taurinos, que se celebraron por última vez en 1955, y que se recuperaron en 1976, las fiestas de la Misericordia quedaron un tanto vacías de contenido, al margen de los actos propiamente religiosos. Eso hizo que la Comisión de Fiestas Municipal lanzara varias propuestas como celebrar unos juegos florales, pero al final fue el primer motor festivo de la ciudad el que dio una respuesta satisfactoria al programa, organizando la primera Batalla de Flores.
se nota que toda la corte 2008 te quiere.