Se retoman las obras de remodelación de red de agua potable
Javier Perelló: “Por el descenso de fugas se ha reducido el gasto de agua un 30%”
El Ayuntamiento de Burriana ha retomado el Plan de Mejora de Infraestructuras Hidráulicas, que se puso en marcha en 2005.
Se trata de la decimoquinta fase de un proyecto impulsado por el Ayuntamiento y ejecutado por la empresa adjudicataria del servicio Municipal de Suministro de Agua Potable, que ya cuenta con más del 70% de la ciudad con la nueva red de tuberías polietileno de 75 milímetros.
El edil delegado de Servicios Públicos del Ayuntamiento de Burriana, Javier Perelló, ha visitado las obras de renovación de la red de agua potable, que se están desarrollando en diversas calles del casco antiguo de la ciudad, acompañado de el director de Facsa, Pascual Maximino; el ingeniero delegado de la empresa en la ciudad, Rafael Lahuerta y el ingeniero jefe del Ayuntamiento, José Luis Monfort.
El proyecto supone 450.000 euros de inversión y se distribuye en tres áreas de actuación. La primera de ellas se puso en marcha el pasado 18 de enero y se está desarrollando es en la Calle Vinaralls y adyacentes y supone un plazo de ejecución de 10 semanas. La segunda de las zonas, contempla el entorno de calle Illes Columbretes, situado en los poblados marítimos. Zona, cuyas labores comenzarán el día 6 de febrero y tendrán una duración de 8 semanas. La última de las zonas es la de la calle Bisbe Luis Pérez, cuyas labores de renovación de la red, comenzarán en abril y se contempla que tengan una duración de 16 semanas.
Según declaraciones del edil Javier Perelló “esta es una actuación necesaria ya que la antigua instalación de la red que era de 12 milímetros de diámetro de plomo y que estaba en malas condiciones, provocando numerosas fugas y el consiguiente gasto. Con la nueva instalación hemos notado el descenso del 30% en el consumo de agua, porque ya no hay tantas fugas”.
La actuación que se viene desarrollando desde hace siete años, ya cuenta con más del 70% de la ciudad con la nueva instalación de tuberías de polietileno de 75 milímetros, lo que, según el edil, dejaría un 30% en acometer, calculado que estará finalizada en el plazo de 5 o 6 años.
En este sentido Perelló ha recordado que “este plan de renovación va incluido en el recibo del agua potable, con lo que todo el mundo lo está pagando pero supone una mejora considerable en el servicio”.
La gran desventaja de las tuberías de polietileno es que son poco resistentes mecánicamente a los esfuerzos o tensiones. En cristiano, a la mínima vibración del subsuelo debido a que pasan por encima de las carreteras camiones de gran tonelaje o el simple de hecho del contínuo ir y venir de los coches, causan roturas y pérdidas de agua, lo que significa que no son apropiadas para el subsuelo urbano, por eso se utilizan industrialmente porque están exentas de cualquier perturbación. Así pues, dentro de unos años deberemos de volver a cambiar las tuberías porque se abrán vuelto a agrietar. ¿Por qué no utilizamos tuberías de PVC? AAAAhhh es que son más caras y la empresa que tiene contratada el ayuntamiento no las puede suministrar, entonces, es la pescadilla que se muerde la cola; es decir, pongo tuberías durante 5 años y al sexto cambio las que puse en el primero. Muy buen negocio.....