Los partidos de la oposición denuncian que el proyecto de reparcelación de Sant Gregori está parado y Aguilera afirma que Perelló miente cuando afirma lo contrario

Los portavoces de los tres grupos de la oposición han denunciado hoy que el proyecto de reparcelación de Sant Gregori está parado por la falta de decisión del Partido Popular que no indica a la empresa cual es el camino que debe tomar. PSOE, CIBUR y CV piden al alcalde que coja el toro por los cuernos, le diga a la empresa que siga trabajando, bajo el supuesto de que el Ayuntamiento va a pagarle las cuotas de urbanización, – con independencia de lo que diga en su día la disposición transitoria de la ley del Suelo, que habrá que acatar –, y se una a otros pueblos que tienen el mismo problema para presionar a la Consellería para que aclare cuanto antes qué es lo que hay que hacer respecto a la aplicación de la ley del Suelo. “El tema, afirma el PP, es prioritario, pero no lo será tanto cuando la ley está en vigor desde el 1 de julio del año pasado y todavía no se han pronunciado”, han señalado.

El equipo de Gobierno anunció el pasado lunes que iba esperar a la contestación que dé la Generalitat, respecto a la disposición transitoria que se ha de pronunciar sobre la aplicación del art. 16.1b de la Ley estatal 8/2007, de Suelo, antes de tomar una decisión sobre Sant Gregori. Dicha ley establece que la cesión del suelo correspondiente a los Ayuntamientos deberá hacerse libre de cargas de urbanización, que pagarán el resto de propietarios. No obstante, el concejal de urbanismo, Javier Perelló, explicó que la parcela del Ayuntamiento va a seguir siendo la misma (tenga que pagar o no), por lo que le habían pedido al Agente Urbanizador que siga trabajando en el proyecto de reparcelación.

Los tres partidos de la oposición han informado hoy, tras haberse reunido con la empresa, que el proyecto de reparcelación está parado, lo cual se contradice con lo afirmado el lunes por Perelló. Preguntados sobre si tras reunirse con la empresa ésta estaba parada, a la vista de lo manifestado por el concejal de urbanismo el pasado lunes, la portavoz de CIBUR, Mariola Aguilera ha declarado que “la empresa está parada por el siguiente motivo: cuando nosotros nos reunimos con la empresa nos hicieron ver una serie de cosas que podían ocurrir, y problemas que ellos iban a tener si se aplicaba el informe vinculante que se había encargado al gabinete de Valencia. Este tema es el más gordo, entre comillas, y la empresa no puede seguir trabajando si el Ayuntamiento de Burriana no le dice en qué sentido tiene que trabajar. Es verdad que el informe de Amparo Baixauli no sólo habla de la aplicación de la ley del Suelo, sino de toda una serie de cosas que se tienen que corregir, pero todas esas cosas, si tu no sabes si tienes que volver a reparcelar o a retasar, no se puede trabajar. Nosotros les trasladamos el tema claramente: somos los grupos de la oposición, y por desgracia, hoy por hoy, tiene mayoría absoluta el Partido Popular. Entendemos que ellos son los que les tienen que marcar las directrices”.

“La empresa ahora está parada, reiteró, porque nadie le dice desde el Ayuntamiento por donde tiene que ir. Y el señor Perelló miente, o por lo menos a nosotros en la Junta de Gobierno nos ha mentido, porque nos dijo que la empresa seguía trabajando en el tema, cuando es mentira, y también nos dijo que desde el Ayuntamiento se iba a tomar una decisión rápida, cuando es mentira, porque nosotros hemos hablado con los técnicos de urbanismo, y siguen su camino. Ellos están informando en base al informe vinculante que tienen, y nadie les ha dicho lo contrario. Con lo cual ni la empresa está trabajando, ni el Ayuntamiento, ni el concejal de urbanismo ha dicho la verdad”.

El portavoz del Partido Socialista, Ramón Monferrer, ha afirmado que “la indefinición acarrea unas consecuencias, de tal forma que ni los propietarios ni los urbanizadores tienen seguridad, y el proyecto está en una situación muy delicada, y podría perfectamente acabar y desestimarse. Eso no es serio. Hemos tenido unos años de bonanza que no hemos aprovechado. Ahora tenemos un momento de desaceleración y de crisis urbanística y no podemos jugar con la empresa. Se han de tomar decisiones que sean claras y que sean determinantes, porque un proyecto como ese, del que ha hablado mucho el equipo de Gobierno como el proyecto que cambiaría el pueblo: ¿dónde está?. No puede estar en un cajón, dando vueltas y vueltas, y ahora poner contra la espada y la pared a la empresa, a los propietarios y al pueblo. Esa es la situación que se genera por la indecisión. Cuando uno gobierna ha de gobernar y ha de tomar decisiones. Lo que no puede ser es que una persona esté gobernando y deje que el tiempo se encargue de aclararlo todo. El tiempo no lo aclara, y en estos casos lo que haces es crear más problemas. Por tanto si tienes la responsabilidad de gobierno actúa, y toma decisiones, y tira adelante con valentía. Este pueblo lo que quiere es que se tomen decisiones que lo hagan progresar y no indecisiones que paralicen la situación, y más en un momento delicado como el actual. La indecisión provocará probablemente el fin de Sant Gregori y que no se haga. De qué sirve aprobar un Concierto Previo que declara urbanizable el 40 % del término municipal de Burriana si después no se es capaz de impulsar un proyecto emblemático como este. Sant Gregori se presentó el 16 de noviembre del 2000. En estos momentos aún no sabemos si se llevará a término - y lo digo con todas las palabras -. 8 años de burocracia y ni una maquina trabajando. La mitad del tiempo durmiendo en cajones el sueño de los justos. Con el anterior alcalde por motivos poco claros, y con el actual porque es incapaz de tomar una decisión clara y decidida, como nos ha demostrado hasta la fecha en los temas importantes y controvertidos. Vosotros sois testigos de que el alcalde dijo que el próximo mes de septiembre las maquinas estarían trabajando en Sant Gregori. ¿De qué año?, señor Calpe”.

Mercedes Giménez, de Coalició Valenciana ha señalado que la historia de Sant Gregori es realmente esperpéntica. “Este fue el proyecto que impulso todo lo que ha venido después. Fue el proyecto que ilusionó a Burriana y no entendemos qué es lo que ha pasado en Sant Gregori. La adjudicación provisional se produjo en agosto de 2001, y después de seis años, en un pleno esperpéntico, el señor Alfonso Ferrada salió diciendo que tenía dudas. El proyecto, durante la legislatura anterior, se intentó paralizar, y nosotros aún no hemos sabido el porqué. Eso nos ha conducido a la situación en la que nos encontramos actualmente, porque si se hubiesen hecho las cosas como tocan ya podría estar empezado”.