A partir del lunes las maquinas terminarán con aquellas alquerías de Sant Gregori que estén dentro de la red de viales

Las maquinas, que entrarán a trabajar el próximo lunes en Sant Gregori, no se detendrán si se topan con una alquería como las muchas que hay ocupadas en la órbita del PAI, que se extiende sobre una superficie de 3.075 hanegadas. En Sant Gregori, desde hace años, y debido al abandono de campos y casas rurales, existe un gran número de alquerías habitadas, en su mayoría por extranjeros de origen rumano y búlgaro, que ahora deberán marcharse; al menos, de aquellos lugares que van a desbrozarse, y que representan el 19 % de la superficie de la urbanización, correspondiente a los 70.000 m² de la reserva de tortugas y 421.061 m² de toda la red viaria.

Fuentes de la empresa urbanizadora confirmaron que el lunes día 24 de enero, a las 8 de la mañana, las maquinas entrarán en la zona y empezarán a abrir lo que será el trazado de calles y avenidas, partiendo del camí La Mar de Vila-real. En este sentido, si en su camino se interpone una alquería la derribarán, porque tal y como confirmaron, todas las construcciones están indemnizadas, y por lo tanto no hay nada que impida realizar el trabajo. De estar ocupadas, avisarán a sus moradores para que las abandonen, y no prevén mayores problemas, pues los ocupantes, aunque sean de fuera, sabían que más pronto o más tarde había una fecha de caducidad. Respecto a otras construcciones, si van a ser selectivos con las acequias; unas se destruirán y otras no, atendiendo a que si bien ya no realizan su función principal, la de regar los campos, sí sirven aún como canal de evacuación de escorrentías hacia el mar, en caso de fuertes lluvias.

Diez años, dos meses y 8 días después de presentarse el PAI, un 16 de noviembre de 2000, comenzarán los trabajos del primer PAI de golf de Burriana, y el segundo de la provincia, después de Doña Blanca Golf, en Torreblanca, que lo hizo hace dos meses.

La tramitación, pese a todo, aún no ha finalizado, puesto que ha de cumplimentarse toda la fase de inscripción en el Registro de la Propiedad de Nules, y los tribunales todavía han de dirimir una decena de recursos contenciosos administrativos que hay interpuestos contra el acuerdo de aprobación del proyecto de reparcelación, basándose en argumentos como que el PAI está caducado, dado que el plazo legal máximo era de 5 años y no se acordó ninguna prórroga por parte del Ayuntamiento. También se cuestiona la adjudicación de la parcela del campo de golf al Agente Urbanizador, sin dar opción a posibles terceros.

Pese a todo, se inicia un camino, que aunque las previsiones son de 36 meses, no se sabe lo que va a durar, y a qué nuevos inconvenientes se puede enfrentar el PAI. Lo que si parece claro es que el pago de las cuotas de urbanización está garantizado por los avales que se presentaron en su día, y en caso de no responder los propietarios de los terrenos tendrán que hacerlo las entidades financieras.