Burriana inaugura la exposición “Mans” de Adrià Pina en La Mercé

La Mercé ha acogido esta tarde la inauguración de la exposición Mans del pintor valenciano Adrià Pina, organizada por la Concejalía de Cultura. La alcaldesa, Maria Josep Safont, y el edil de Cultura, Vicent Granel, han inaugurado la muestra junto al artista, y el comisario de la exposición, Aureli Doménech, quiénes se han encargado de explicar la obra expuesta.

Con gran asistencia de público a la inauguración, la exposición contará con un catálogo que se presentará el próximo sábado 17 de febrero, coincidiendo con la celebración de la feria de música y arte, emac.Burriana en la localidad. De esta manera, el artista podrá estar en contacto con el movimiento artístico que se vive esos días en la ciudad de Burriana.

La muestra que estará abierta hasta el 18 de febrero es un repaso a uno de los aspectos más característicos de la obra de Pina (L'Alcúdia, 1959) como son las series. Con un estilo pulido con el tiempo el realismo es la base de sus representaciones que toman referencias de obras y de autores claves en el arte contemporáneo.

Mans es una serie especial en la obra de Pina continuamente visitada y reinterpretada transversalmente en su trayectoria. En del vasto universo visual característico de Adrià, como las citas pop, las arquitecturas históricas, la cultura de masas, y los temas universales de la cultura occidental, Mans es como un retorno al hogar, a la introspección, y, sin duda, a la familia y amigos.

Mans vive, de nuevo, una especie de renacer. Sus primeras manos, aquellas que fueron de su madre, se mostraban desnudas y eran prácticamente cuadros monocromáticos. Años después, principalmente con las manos de sus hijos, la serie vivió una eclosión de color. Eran manos manchadas de pintura, fuertemente cromatizadas, como jugando dentro del cuadro. Un símbolo más en su pintura. Mans es una serie que mezcla este eterno ritornello de la obra de Pina con referencias visuales de obras muy conocidas de Miró, Mondrian, Kandinsky... que con las imágenes propias del universo de Pina alteran, retornan, y mutan de significado. En definitiva, con la maestría técnica que le caracteriza, Adrià nos vuelve a hacer jugar con otra de sus series, una imagen de millones de imágenes.