Ciudadanos por Benidorm exige al alcalde Navarro que explique dónde está la herencia de la Fundación Cortés Roig
Coincidiendo con la celebración mañana miércoles día 15, de la sesión ordinaria del Consejo Vecinal de Benidorm donde se debatirán, entre otros asuntos, las conclusiones sobre la investigación realizada de la Fundación Cortés-Roig, el líder de Ciudadanos por Benidorm, Leopoldo Bernabeu, ha exigido al alcalde Agustín Navarro “que explique al pueblo dónde está la herencia dejada en 1922 valorada en treinta mil millones de pesetas para el cuidado de ancianos y personas pobres, así como una herencia que debería ir destinada a la educación de los niños de familias sin recursos”.
Bernabeu recuerda al alcalde que él es el máximo responsable junto con el resto de patronos de la Fundación Cortés Roig, de todo cuanto suponga la gestión del ente, “del que se supone que hay reuniones anuales para la aprobación presupuestaria y balance de gastos e ingresos, y de lo que nada ha trascendido en más de noventa años”, aludiendo a la figura de la “transparencia que tanto pregona, y a sus eslóganes de ser un alcalde que se vuelca con los ciudadanos y con Benidorm. Pues ahora tiene la gran oportunidad de demostrar lo que no hicieron sus predecesores, que es contar al pueblo de Benidorm y a los ciudadanos de Benidorm quiénes, cómo, cuándo y por qué, se vendieron más de veinte fincas de las veintiocho que dejaron en herencia, y que diga dónde fueron a parar los cientos de millones que supusieron esas ventas entre 1945 y finales de los 90”.
De igual forma, Leopoldo Bernabeu pregunta al primer edil “si es cierto o no que en el Ayuntamiento de Benidorm se ha recibido petición del Conseller de Justicia de la Generalitat Valenciana de los informes de la trayectoria de esa herencia”, dado que “parece que en Valencia se han enterado del expolio que ha sufrido el patrimonio municipal y Luis Santamaría, Conseller de Justicia, pretende depurar responsabilidades”.
Para el líder de Ciudadanos por Benidorm, “la memoria de D. José Cortés Lloret y Doña Ana María Roig Llorca, merece esclarecer este triste asunto, y su recuerdo no puede limitarse a una calle con su nombre en el barrio de Imalsa-Els Tolls”. El actual alcalde, como conocedor del expolio, “ha de dar la cara, contarnos todo a los benidormenses, y ponerse a disposición de la Justicia para cumplir el deseo de los donantes plasmado en escritura pública ante notario un 4 de noviembre de 1922”, concluyó Leopoldo Bernabeu.
