Una nueva Vía Verde unirá las localidades de Benicàssim y Oropesa del Mar
La Vía Verde, de seis kilómetros de longitud, se iniciará en el casco urbano de Benicàssim, en el antiguo Pont de Ferro del Pontazgo y finalizará en el cruce entre las calles de Tramuntana y Garbí, en la vecina localidad de Oropesa del Mar.
Ese proyecto de Vía Verde se remonta a mediados de 2006, cuando la Generalitat Valenciana lo expuso a información pública.
Las actuaciones, que se estiman ejecutar en ocho meses, consisten en el acondicionamiento de la vieja plataforma ferroviaria para que pueda ser utilizada por peatones y ciclistas, al tiempo que será accesible para personas con movilidad reducida.
La Vía Verde tendrá un ancho, en general, de cinco metros e incluye la propuesta formulada por el Ayuntamiento de Benicàssim, de conectar la Vía Verde con el futuro bulevar y con la nueva ruta cicloturista y paisajística del municipio, de 15 kilómetros ya en ejecución.
De ese modo, esta nueva Vía Verde completa todo el conjunto de itinerarios peatonales y ciclistas existentes entre Castellón y el Grau, que se prolongan a lo largo del litoral hasta Torreblanca, y que únicamente se veía interrumpido por el abrupto relieve costero entre Benicàssim y Oropesa.
