Aspe cede a la Generalitat 5.754 m2 para la construcción del nuevo centro de salud
La administración autonómica será titular del suelo mientras se destine a tal fin
En el pleno ordinario de febrero celebrado la pasada semana, el Ayuntamiento de Aspe acordó por unanimidad ceder una parcela de 5.754 metros cuadrados de superficie, calificada como equipamiento asistencial, a favor de la Generalitat Valenciana para la construcción del futuro centro de salud de Aspe. La administración autonómica debe ahora dar su conformidad a esta transmisión llevada a cabo por la llamada “mutación demanial externa”, una figura que permite agilizar y justificar la cesión entre las dos administraciones públicas.
Al mismo tiempo, el plenario adoptó el compromiso de llevar a cabo las obras de urbanización necesarias para dotar a la parcela de la condición de solar. El proyecto de ejecución ya está redactado y la consignación total de los trabajos consta en el presupuesto del presente año 2016.
La parcela que ahora se cede, lindante al camino La Coca, inscrita ya en el inventario municipal de bienes y derechos, fue obtenida en virtud de un convenio firmado el pasado 17 de diciembre con la familia Alberola Carrión, anteriores propietarios, presentándose en el Registro de la Propiedad de Aspe.
La concejala de Urbanismo y Obras, la socialista María José Villa, ya ha dicho que espera ver colocada la primera piedra del nuevo centro de salud para finales del próximo verano, coincidiendo con el inicio de las obras de urbanización, algo que ya anunció cuando manifestó que se estaba trabajando para que fueran paralelas la edificación y la urbanización del sector. “Vamos cumpliendo etapas, ha declarado la edil, porque la colaboración entre las administraciones está siendo un hecho y porque nuestros vecinos se merecen todos los esfuerzos para que por fin se haga realidad disponer de un mejor servicio sanitario”.
Villa ha recordado que se han cumplido 25 años de la apertura del actual centro de salud (se inauguró en 1991) cuando gobiernos progresistas en el Ayuntamiento de Aspe y la Generalitat Valenciana apostaban por un modelo público que, ha dicho, “espero que en el futuro podamos recuperar porque con la salud de las personas ni se juega ni se especula”.
