Truculenta victoria del RC Alzira (36 - 12) ante la Universidad Católica
No fue nada fácil conseguir la victoria ante el club universitario de Valencia. Cierto es que el resultado final de 36 a 12 parece cómodo pero el partido no lo fue en absoluto. En un encuentro en que hubo de todo, ausencias (la del capitán del Alzira "Xulet"), despropósitos, lesiones, expulsiones......, los alzireños no "estuvieron" prácticamente en todo el partido y a todo esto, el rival, que algún mérito había de tener, supo defenderse como gato panza arriba.
Finalmente, Tomás Pardo pudo contar con Álex Palop que debía jugar este fin de semana en el País Vasco con la Selección Valenciana Sub21 pero que no pudo acudir por motivos laborales.
En toda esta coyuntura, el primer ensayo local no llegaría hasta la media hora de juego, obra del jugador jienense Javier López (5-0). Hasta entonces el Alzira no había sido capaz de dominar ni de crear ocasiones y ya había perdido a dos hombres fundamentales por lesión, Juan Calabro y David Ferrer. La buena defensa visitante y la falta de liderazgo y descontrol en el juego alzireño, hacían que el balón no tuviera dueño. Unos minutos antes del descanso y en una jugada aislada, era Pablo Pepiol el que con su habilidad habitual lograba el segundo ensayo, esta vez transformado por Palop (12-0).
En el segundo tiempo y pese a las indicaciones técnicas y el propósito de enmienda del descanso, no mejoraron las cosas, el partido continuó por la senda de los despropósitos. Los jugadores universitarios se "paseaban" con impunidad en fuera de juego por los agrupamientos creados por los locales, impidiendo las rampas de lanzamiento anteriores a los ataques. Dos expulsiones temporales por parte del Alzira. Tres tarjetas rojas, dos para el Alzira, una para la UCV.
En medio de todo este desbarajuste, todavía se pudieron lograr tres ensayos más, obra de Darío Ferrer y dos de Álex Palop que sigue en racha y logró pasar además tres transformaciones y un golpe de castigo. Entre medias, los visitantes lograron sus dos ensayos, uno de ellos transformado, que dejaban el marcador definitivo de 36 a 12.
En definitiva, victoria, si, pero a un alto precio, lo que a priori parecía que iba a ser un partido cómodo antes de afrontar los próximos enfrentamientos ante Montcada (segundo clasificado) y San Roque (líder), deja un bagaje de tres lesionados y dos expulsados que va a complicar y mucho la vida al técnico alzireño Tomás Pardo para afrontar estos encuentros.
