La OMIC de Alzira localiza 9 unidades de un producto inseguro por su riesgo químico
La OMIC de Alzira visita los establecimientos de la localidad en los que pudieran encontrarse productos notificados como peligrosos con la finalidad de comprobar si se encuentran comercializados. En cada visita de inspección se entrega al comerciante toda la documentación de la notificación, además de dejar constancia por medio del acta de inspección. Es un trabajo exhaustivo, en el que el/la técnico/a de la OMIC que se desplaza al establecimiento hace un seguimiento del producto y deja constancia en el comercio de un documento en el que el dueño del mismo se compromete a no comercializar cualquiera de los productos notificados como peligrosos.
La concejala de Consumo, Mercedes Bañeres, ha manifestado: “Desde la OMIC de Alzira realizamos las inspecciones oportunas cuando nos notifican la existencia de una alerta. En este caso se trata de un producto inseguro por su riesgo químico que ya no está a la venta en ningún comercio de la localidad. El trabajo es exhaustivo ya que hay que visitar los diferentes comercios en los que se puede comercializar el producto de la alerta, todo ello para garantizar la seguridad de los consumidores”.
Cabe destacar la participación activa de la OMIC de Alzira dentro de las actuaciones en materia de seguridad de los productos y campañas de inspección. En 2010 participó en un total de 97 alertas. En lo que llevamos de año, la Generalitat Valenciana ha detectado 112 alertas que, de forma aleatoria, remite a cada una de las OMIC repartidas por toda la Comunidad.
Las alertas son un sistema de intercambio de información de productos inseguros, a través de la Red de Alertas con puntos de contacto en todos los estados de la Unión Europea, coordinados por la Comisión Europea, por medio de la Dirección General de Salud y protección a los Consumidores y a nivel nacional por el Instituto Nacional de Consumo. Existen otro tipo de notificaciones emitidas por el INC y la Comisión Europea, cuya ejecución corresponde a las Comunidades Autónomas.
Por medio de este sistema de comunicación, se produce una interconexión entre todas las autoridades competentes en materia de consumo: Comisión Europea, ámbito nacional, autonómico y local.
