La Escuela de Educación Vial de Almussafes cumple una década
El Ayuntamiento de Almussafes acaba de inaugurar la décima edición de su Escuela Municipal de Educación vial, una propuesta en la que participan activamente los más de mil alumnos de los tres centros educativos de la población y que dirige el Departamento de la Policía Local. Hasta la fecha, la iniciativa iba destinada a los escolares de infantil, primaria, secundaria y bachillerato, aunque este año se está valorando la posibilidad de abrir la campaña, asimismo, a los estudiantes de Ciclos Formativos, con la finalidad de brindar una conciencia vial adecuada y responsable a un mayor número de jóvenes de la localidad. La educación en valores y el conocimiento del entorno son dos de las premisas básicas sobre las que se sustenta el programa de educación vial, coordinado en esta edición de 2017 por el agente Jacob Romero y que se clausurará el próximo mes de mayo.
El policía local, Jacob Romero, dirige la nueva edición del plan formativo que contempla cinco sesiones de educación vial al año por alumno, en el caso de infantil y primaria, y de dos a tres clases, en cuanto a los estudiantes de secundaria, bachillerato y ciclos formativos. Esta semana, los talleres se están impartiendo en las diferentes aulas del CEIP Almassaf y el programa se celebrará la próxima semana en el CEIP Pontet. Con posterioridad, el proyecto, que ahonda en el complejo mundo de la circulación y el tráfico motorizado, se trasladará hasta el IES Almussafes.
La iniciativa, "que apuesta por la prevención y la pedagogía, con el objetivo de que esos conocimientos cumplan con su finalidad, es decir, tengan una repercusión positiva a pie de calle", constata Romero, incorpora sesiones de carácter teórico, aunque también incluye actividades destinadas a poner en práctica los consejos aprendidos previamente en las aulas, en recorridos que se llevarán a cabo por el núcleo urbano durante el presente curso educativo.
La amplia horquilla de edades que abarca el programa municipal de educación vial 2017 invita a impartir contenidos diferentes, basándose asimismo en técnicas y elementos formativos dispares. En este sentido, los más pequeños van a poder disfrutar de clases teóricas donde los juegos, las fichas y el material audiovisual reflejan diferentes aspectos de la educación viaria. Asimismo, los alumnos de infantil y primaria realizarán visitas al retén policial, para conocer de primera mano las características de los vehículos y material policiales, además de aplicar los conocimientos adquiridos de forma práctica en el circuito de educación viaria que se instalará al final del curso en el propio patio de ambos centros educativos.
Por su parte, el plan formativo dirigido a los estudiantes de secundaria, bachillerato y ciclos formativos apuesta por sesiones centradas en el aprendizaje de las normas, señales y consejos relativos a la conducción de bicicletas y ciclomotores, así como en las nociones básicas sobre primeros auxilios y en las medidas a tomar en caso de accidente. "Además, en el temario hacemos especial hincapié en los peligros que comporta el consumo de estupefacientes y alcohol, así como la velocidad excesiva en la conducción de los vehículos, principalmente las motocicletas, bicicletas y ciclomotores", matiza el concejal de Seguridad Ciudadana, Faustino Manzano.
