El Consistorio de Almussafes aboga por el reciclaje y la mejora del entorno medioambiental de su término

Durante la sesión plenaria celebrada durante la tarde de ayer jueves en Almussafes, la totalidad de los miembros corporativos presentes dieron luz verde al texto regulador de la recogida y tratamiento de desechos y residuos sólidos urbanos, en cumplimiento de la Ley de Residuos y Suelos Contaminados del 28 de julio de 2011. Concluido el período legal de información pública, establecido en un plazo de 30 días, la norma municipal entrará en vigor y con ella el ayuntamiento podrá sancionar a aquellos vecinos que incurran en infracciones como el incumplimiento de los horarios de depósito de los residuos o no aplicar el correspondiente reciclaje en los contenedores y puntos de recogida habilitados al efecto, entre otras transgresiones al texto regulador.

El artículo 45 de la Constitución Española establece, como principio rector de la política social y económica, el derecho de todos a disfrutar de un medio ambiente adecuado para el desarrollo de la persona, así como el deber de los poderes públicos, entre ellos el municipio, de conservarlo.

En cumplimiento de lo anterior, se aprobó la Ley 22/2011, de 28 de julio, de Residuos y Suelos Contaminados, que establece, por un lado, las competencias de los Entes locales en materia de residuos y, por otro, la obligación de las Entidades locales de aprobar ordenanzas que se adapten a dicha ley.

Por todo ello, el Consistorio de Almussafes acaba de ratificar la Ordenanza municipal de recogida y tratamiento de desechos y residuos sólidos urbanos, en la que no se regulan de forma extensa los residuos catalogados como peligrosos, por no tratarse de una competencia municipal, aunque sí que se reglamentan todas las cuestiones relativas a la gestión de residuos, atendiendo a las demandas sociales con el objetivo de mejorar la calidad de vida y el medio ambiente de la localidad y mitigando al máximo los impactos adversos.

Estructurada en tres Títulos y dos Disposiciones Finales, la norma desarrolla la legislación estatal y autonómica en materia de residuos y de régimen local, de obligado cumplimiento por parte de todas aquellas personas físicas o jurídicas que residan o depositen residuos en el término municipal de Almussafes.

Centrándose en el análisis detallado de la ordenanza, el primer Título incorpora como novedad la potestad del consistorio municipal de recoger los residuos comerciales no peligrosos, además de concretarse también todas las obligaciones de los ciudadanos de Almussafes en relación con la separación y entrega de residuos.

Por su parte, el Título segundo se centra en el Servicio de Recogida, distinguiendo entre un servicio ordinario y un servicio especial; siendo común a ambos la necesaria separación por los ciudadanos de los residuos en distintas fracciones para favorecer el reciclaje y el cumplimiento del principio de jerarquía.

Con el objetivo de que la ciudadanía pueda cumplir correctamente con todos los preceptos establecidos en la nueva normativa, el consistorio municipal va a llevar a cabo una serie de mejoras medioambientales en el casco urbano. En concreto, explica el concejal de Medio Ambiente, Jesús Salesa, “vamos a instalar dos nuevas islas ecológicas, que se sumarán a las más de veinte existentes en la actualidad, además de proceder a la adquisición de aproximadamente un centenar de nuevas papeleras que colocaremos en aquellas zonas de la localidad más adecuadas y al anclaje de los contenedores de residuos sólidos”.

Las infracciones conllevarán sanción

Finalmente el Título III aborda la Inspección y Sanción, incardinándose ambas potestades en la Ley 22/2011, de 21 de abril de Residuos y Suelos Contaminados. De hecho, se considerarán infracciones leves el depósito de los residuos sin compactar para reducir su volumen y aprovechar al máximo la capacidad de las bolsas y contenedores o no llevar a cabo la separación de los mismos en los contenedores o puntos de recogida identificados para cada fracción.

Asimismo, el incumplimiento de los horarios de depósito y entrega de residuos facilitados por el Ayuntamiento o el abandono de residuos en la vía pública en lugares distintos a los habilitados también serán objeto de infracción leve. “Con la entrada en vigor de esta ordenanza, pretendemos conseguir una mayor concienciación ciudadana para acciones tan habituales en el día a día como depositar residuos de pequeño volumen, como chicles, colillas, caramelos o cáscaras, fuera de las papeleras que tenemos instaladas en los espacios públicos, o la manipulación de papeleras o contenedores, incluyendo su desplazamiento”, destaca Salesa. De hecho, estas conductas sí que se consideran como infracciones leves y por lo tanto pueden ser objeto de la correspondiente sanción.