La prestación de la silla anfibia encabeza la lista de actuaciones de Cruz Roja

La utilización del servicio de silla anfibia en la playa de Almassora lidera el número de servicios que ha prestado Cruz Roja en el litoral de la localidad desde el pasado 19 de junio. Así lo ha indicado el coordinador de Cruz Roja en la localidad, Pedro Martínez, después de que la pasada semana se cumplieran dos meses desde que la entidad ocupara el litoral del municipio con el objetivo de mantener un control y vigilancia de la fachada marítima del municipio.

El titular de la cartera de Salud Pública, Diego Castell, ha incidido en la relevancia de un programa que el Ayuntamiento de Almassora contrata cada año con el objetivo de que los bañistas del municipio disfruten de la costa con plenas garantías de seguridad. El servicio, que entró en marcha el pasado junio, “se mantendrá hasta el próximo 19 de septiembre, de modo que todos los usuarios de nuestras costas dispongan de una prestación a la que pueden acceder de forma gratuita”.

“Por lo pronto, tal y como han señalado desde Cruz Roja, la tranquilidad es la tónica dominante en nuestro litoral, y esperamos que así lo siga siendo durante el mes que queda hasta el cierre del servicio”, ha considerado Castell. De hecho, encabeza la veintena de actuaciones que ha registrado la entidad, el número de salidas de voluntarios dirigido a facilitar el acceso de los bañistas a la playa con silla anfibia. “Una clara muestra de que nuestro litoral está disfrutando de un verano tranquilo y seguro”, ha considerado Castell.

Cruz Roja ha atendido asimismo heridas leves por contacto con medusas o erizos, mientras que el control de los voluntarios a lo largo de los tres kilómetros de playas se ha producido sin incidencias, “ya que todos los bañistas han respetado la señalización de banderas que se ha colocado en el litoral”. La playa de Almassora cuenta con diez profesionales destinados al litoral, seis socorristas acuáticos, uno terrestre, dos patrones de embarcaciones y un coordinador del servicio, están distribuidos entre las playas de Ben-Afelí y Pla de la Torre, con puestos fijos y torres de vigilancia en cada uno de ellos.

El servicio que prestan los voluntarios en el poblado marítimo de la localidad consta de paseos preventivos diarios para supervisar el estado del litoral y la presencia de bañistas, facilitar información puntual a los usuarios del estado de la mar a través del izado de banderas, así como prestar la atención necesaria a todos los ciudadanos que requieren de los servicios de los profesionales.