El temporal marítimo obliga a Almassora a cortar de nuevo al tráfico el paso por el muro

Transcurridas poco más de tres semanas desde que el pasado 14 de diciembre Almassora se viera obligada a cortar al tráfico el paso por el muro de su litoral, la localidad ha cerrado nuevamente esta madrugada la circulación por la zona como consecuencia de un nuevo temporal marítimo. La Policía Local y el retén de limpieza de acequias, así como la brigada de obras se han movilizado para actuar frente a un fuerte oleaje que ha vuelto a arrastrar gravas y arenas sobre este paso rodado que ha registrado nuevamente los daños más graves en el tramo central del litoral, el punto que desde el consistorio reclaman a Costas que defienda y regenere.

Vicente Casanova, alcalde de Almassora, arropado por el regidor de Playas, Vicente Bernat, y el concejal de Seguridad y primer teniente de alcalde, Luis Martínez, se ha trasladado a primera hora de la mañana al litoral para conocer los efectos del temporal marítimo sobre el poblado marítimo. “Hemos activado los dispositivos municipales diseñados para hacer frente a este tipo de episodios y hemos contactado con Costas para que se desplace hasta el litoral equipos humanos y materiales que permitan desviar la entrada de agua a las viviendas de primera y segunda línea de costa”.

El primer edil se ha entrevistado asimismo con los coordinadores del dispositivo establecido por el consistorio y con responsables de la firma Facsa, también desplazados a la zona, para analizar el estado de la situación y “adoptar las medidas que nos permita el temporal, puesto que mientras siga batiendo el mar es complicado adoptar algún tipo de medida que frene el oleaje”. La solución, temporal, ha sido canalizar el agua que golpeaba sobre la primera línea de costa para que volviera a la playa, ya que la definitiva “debe venir de una actuación de Costas en este tramo del litoral que, tal y como confirman los sucesivos temporales, requiere de una defensa adecuada que impida a la playa saltar el muro”, ha considerado el primer edil.

El alcalde ha agradecido la rápida respuesta de Costas, que se ha desplazado hasta la zona para evaluar la situación y destinar dos palas al entorno que frenen la acumulación de aguas “que se han desviado a las calles que se encuentran a espaldas de la primera línea y que las bombas de evacuación de pluviales están extrayendo a medida que llegan hasta estos sistemas de drenaje”.

De hecho, durante la mañana el caudal de agua llegado hasta estos sistemas de evacuación sólo ha obligado a activar una de las bombas, ya que la segunda no contaba con un nivel suficiente de agua como para poner en marcha el mecanismo de drenaje. “El sistema está funcionando y se está liberando el agua del mar que llega hasta la bomba. Confiemos en que al temporal marítimo no hayamos de sumar la lluvia”, ha comentado el primer edil junto a vecinos de la zona, entre ellos la presidenta de la asociación Mos Quedem, María Tajes.

Restablecer la normalidad
Los operarios del retén municipal se han dedicado a limpiar los imbornales y a eliminar los tapones que se han creado como consecuencia de la acumulación de gravas y arenas, mientras en la zona marítima “trabajan los equipos enviados por la jefatura provincial de Costas”. El objetivo, tal y como ha declarado el primer edil, es que “a la mayor brevedad posible se restablezca la normalidad y se reparen los daños que ha causado el temporal en la zona marítima, el muro y la calzada que lo bordea”.

“En cuanto sea factible, se procederá a retirar la totalidad de las gravas y arenas acumuladas por el temporal y a eliminar los tapones que ha provocado la acumulación de estos materiales”, ha indicado Casanova. “Esta situación que nos hemos encontrado ha evidenciado que nuestra costa requiere de la ejecución de la segunda fase de la regeneración que permita frenar la regresión en la tercera celda y en cuya redacción Costas nos ha confirmado que se emplea”, ha señalado el alcalde.