El consistorio reúne a Consell y Regina Violant para mejorar las condiciones del colegio
La alcaldesa de Almassora, Merche Galí, ha reunido hoy en el consistorio a la comunidad educativa del colegio Regina Violant y a los máximos responsables de la Conselleria de Educación en Castellón para acelerar el desbloqueo de los trabajos de construcción y ofrecer la colaboración del Ayuntamiento en todas aquellas medidas que mejoren las "injustas y precarias" condiciones en que estudian los 600 alumnos de este centro desde hace más de una década, en palabras de la primera edil.
El director territorial de Educación, Robert Roig; la jefa del servicio de Educación en Castellón, María José Palmer; el jefe de inspección, Vicent Doménech, y dos arquitectos de la Conselleria de Educación han participado en el encuentro, al que también han asistido la primera teniente de alcalde de Almassora, Susanna Nicolau; y la concejala de Educación, María José Tormo, además del edil Santiago Agustí; la dirección y la AMPA del Regina Violant, entre otros representantes del centro.
Roig ha expuesto a los asistentes la alternativa de ubicar el aula prefabricada de la sala de profesores en planta baja a costa de renunciar a un espacio del patio para evitar la instalación en altura. Los participantes también han valorado prescindir de este espacio de reunión. Será la comunidad educativa la que decida cuál de las opciones afecta menos al desarrollo de la actividad en el centro. El Consell esperará al acuerdo definitivo para instalar o no el barracón antes del comienzo del curso, mientras aguarda la determinación de la empresa adjudicataria sobre la recuperación del ritmo de obra acordado en su día.
El equipo de gobierno ha ratificado, una vez más, su apoyo a las familias y docentes que desde hace más de una década utilizan instalaciones provisionales. El Ayuntamiento mantiene su unión a la reivindicación de padres, madres, docentes y alumnado tras el conflicto con la constructora. Cabe recordar que la obra se adjudicó por más de 5 millones de euros en diciembre de 2015 y la edificación arrancó a finales de junio de 2016 en el antiguo campo de La Garrofera.
