Almassora entrega las primeras bolsas para evitar el abandono de excrementos en vía pública

La concejalía de Salud Pública del Ayuntamiento de Almassora ha entregado las primeras bolsas de recogida de excrementos de animales en vía pública a los vecinos cuyas mascotas se encuentran censadas en el consistorio. El material, adquirido por la cartera que dirige Diego Castell, se entrega con carácter gratuito a todos aquéllos residentes que lo solicitan previa comprobación de que el animal para el que lo solicita se encuentra registrado en el censo municipal.

El regidor ha destacado la buena acogida de esta iniciativa que, por un lado, pretende evitar la proliferación de excrementos de animales en vías y espacios públicos, y, por otro lado, el registro de las mascotas de los vecinos en el censo que está operativo en el consistorio. “El objetivo no es otro que mantener en perfecto estado nuestras zonas verdes. Cualquier vecino o peatón tiene derecho a disfrutar de un entorno público libre de excrementos. Por ello, hemos decidido reforzar nuestras acciones con esta campaña que ofrece a los propietarios de animales unas útiles bolsas que les faciliten la tarea de recoger los residuos que generan sus mascotas”, ha señalado el regidor.

Cabe señalar que la concejalía de Salud Pública ha encargado 500 unidades de este material para poder repartir entre todos los demandantes. Una herramienta a la que cabe sumar el control y vigilancia ejercido por la Policía Local, encargada de sancionar a todo aquel ciudadano que no recoge los residuos que sus mascotas depositan en la vía pública. El edil ha recordado las campañas periódicas que desarrollan los agentes para evitar el abandono de este tipo de residuos en las calles y ha apelado a la responsabilidad de los titulares de mascotas para “que nuestros parques y plazas muestren su mejor imagen”.

El Ayuntamiento de Almassora aprobó el 12 de diciembre de 2004 una Ordenanza Municipal Reguladora de Tenencia de Animales que amplía el contenido de la Ley 4/1994 de la Generalitat Valenciana. La normativa establece un régimen sancionador con el objetivo de evitar que los animales domésticos ensucien espacios públicos, tal y como se detalla en el artículo 57,6 de la citada normativa. Una obligación de la que el consistorio informa no sólo a través de trípticos y campañas informativas periódicas, sino también a través de paletas como la instalada en la zona verde situada junto a la residencia de la tercera edad o en el grupo Pío XII. El texto municipal estipula infracciones leves, con multas entre los 30,05 euros y los 601,01 euros; graves, entre los 601,02 euros y los 6.010,12 euros; y muy graves, aquellas que comportarían sanciones entre los 6.010,13 a los 18.030,36 euros.