El Consorcio de Museos traslada el universo pictórico de Serna Ramos a Madrid
Esta nueva muestra estará abierta al público hasta enero de 2011
José Serna Ramos (Alicante, 1927) es uno de los exponentes de la mítica Escuela de París, considerada la capital histórica de las vanguardias. En torno a 15 obras de mediano y gran formato sirven para presentar la extraordinaria personalidad de este pintor. La exposición es una pequeña colección de sus obras realizadas a finales y principios de siglo, que resumen plenamente la aportación plástica del artista, desde el cubismo de sus primeros años hasta el expresionismo que ha perdurado durante toda su trayectoria hasta nuestros días.
Según el comisario, Rafael Prats Rivelles, “Serna nos introduce en un mundo de personajes, fantasmas de su cerebro, en el que confluyen diversos conceptos vanguardistas de la anterior centuria, asumidos y matizados, para devolvérnoslos en una visión personal que identifica sobradamente la manera de pintar de nuestro creador”.
La obra pictórica de Serna Ramos nos acerca a una visión cósmica y existencial que, con los años, se ha ido enriqueciendo.
Situado en el ámbito del expresionismo abstracto Serna Ramos imprime en sus obras un acento propio con tonalidades oscuras y formas que remiten al misticismo y a un planteamiento esotérico de sus composiciones.
Según Prats Rivelles “no se ha pretendido hacer una antología con esta pequeña selección. La muestra posee un núcleo central que gira en torno a la producción de una época determinada que se entiende como el universo pictórico de Serna. La exposición se completa con obras que evidencian que el artista cuenta con una paleta rica en cromatismo”.
La mayor parte de las piezas de esta exposición estuvieron presentes en la muestra antológica que organizó el Consorcio de Museos hace dos años en el Castillo de Santa Bárbara de Alicante y que pretendía recuperar la figura de este artista poco conocido en su tierra natal.
Esta nueva muestra de Serna Ramos que el Consorcio exhibe en Madrid estará abierta al público hasta enero de 2011. Con ella y tras las muestras previas dedicadas a Aurora Valero, José Biot y Chimo Serrano, la Generalitat valenciana, a través del Consorcio de Museos de la Conselleria de Cultura y Deporte, culmina su primer programa de exposiciones, el cual ha discurrido en paralelo también al primer año de ejercicio de la nueva sala de exposiciones de esta delegación en la capital de España.
El éxito de convocatoria con el que los madrileños han respondido a estas exposiciones se solapa así sobre el propio dinamismo y enorme volumen de actividad que esta delegación ha desplegado para cuantos valencianos, españoles y extranjeros tengan interés por informarse o tramitar sus asuntos y proyectos, desde Madrid, en la Comunidad Valenciana.
Estas exposiciones han servido para ampliar esta ventana de la Comunidad que representa la oficina hacia las artes plásticas valencianas.
José Serna Ramos (Alicante, 1927)
Tras su paso por la Escuela de San Carlos de Valencia (1945-48), sus primeras preocupaciones estéticas y religiosas (estudió en el Seminario Teológico Bautista de Barcelona, entre 1953 y 1955) le conducen a París en 1956, donde sigue formándose artísticamente: consejos de Henri Goetz, clases en la Escuela de Bellas Artes, asistencia a la Academia Grande Chaummière, etcétera.
Su universo íntimo evoluciona hasta convertirse en una expresión espiritual donde el ejercicio plástico juega un papel de gran importancia. Para Prats Rivelles “Serna es un artista encasillado en el surrealismo abstracto. Desde luego, lo suyo es la abstracción –no exenta de referencias figurativas–, algo que descubrió en los años cincuenta, cuando se marchó a la capital francesa en busca de solucionar su vocación evangélica, algo que resolvió tomando la sublime decisión de dedicarse a la pintura abstracta, la cual no le ha supuesto mala terapia pues hizo de él un hombre feliz, que sólo pensó en pintar”.
En París participó en la exposición en la Galerúa Royal, en 1962, y en el Salon de la Jeune Peinture, en las ediciones de los años siguientes. Mediada la década de los setenta regresa a España y hasta 1986 no celebra su primera exposición individual. Fue en el Círculo de Bellas Artes de Valencia; ese mismo año realizó otra en la Casa de Cultura de Altea y, finalizando los noventa, exhibió su obra en la Sala Juana Francés de su Alicante natal.
Salvo alguna participación en colectivas, el curriculum de Serna se completa con alguna individual en la valenciana Galería Muro. Mientras las colecciones Rostchild, Weisweller, Waterman, Offenstadt y Hellman pueden disfrutar de la obra de Serna Ramos, en su tierra apenas se le conoce, siendo su retrospectiva “Más de medio siglo de pintura” el acontecimiento expositivo más relevante llevado a cabo con el trabajo de Serna Ramos; acontecimiento que tuvo lugar el pasado 2008 en el Castillo de Santa Bárbara de su Alicante natal, muestra organizada por el Consorcio de Museos de la Comunidad Valenciana.
