Los Hospitales General de Alicante y Sant Joan implantan un sistema pionero de control de la oxigenoterapia
Permite un mejor registro del cumplimiento terapéutico y facilita la labor de educación para un correcto uso de la terapia
40 pacientes participan en el programa piloto
Este equipo, suministrado y desarrollado por la empresa Carburos Médica, permite a los neumólogos un mejor control de los pacientes con insuficiencia respiratoria. “El sistema consiste en un contador horario que mide el consumo de oxígeno en tiempo real y fiable, de forma que podemos valorar aquellos pacientes que están cumpliendo de forma óptima el tratamiento y detectar aquellos que no lo siguen de forma correcta”, ha destacado el jefe del servicio de Neumología de Sant Joan, Eusebi Chiner.
Estos datos quedan registrados en una plataforma informática APMedicalDirect, la cual realiza informes diarios, mensuales, etc., sobre los hábitos del paciente, permitiendo a los profesionales evaluar el correcto cumplimiento de la oxigenoterapia y su relación con la mejoría o no del paciente. De esta forma, el sistema ofrece a los profesionales datos estadísticos sobre el universo de pacientes monitorizados.
Asimismo, se trata de una herramienta con un gran valor educativo para los enfermos respiratorios, ya que permite al personal sanitario (neumología, atención primaria, enfermería) informarles sobre los errores que cometen en la aplicación del tratamiento, dentro de los programas específicos de educación que requieren este tipo de pacientes.
Según afirma Luis Hernández, médico del Servicio de Neumología del Hospital General Universitario de Alicante, “este servicio ha estado siempre muy preocupado por el correcto cumplimiento de la oxigenoterapia domiciliaria”. Tanto es así que, el Prof. S. Romero del Hospital General de Alicante realizó un estudio, en el año 1992, donde se mostraba un cumplimiento incorrecto en el número de horas de la oxigenoterapia domiciliaria.
“Gracias a este sistema”, ha apuntado Chiner, “también podrían evitarse ingresos hospitalarios de aquellos pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) que no realizan un control adecuado de la terapia con oxígeno, al detectarlo de manera precoz. La EPOC origina diez millones de consultas al año en Atención Primaria y unos 93.000 ingresos hospitalarios; parte de estas estancias podrían verse reducidas con un correcto cumplimiento del tratamiento”.
En las áreas dependientes del Hospital Sant Joan y General de Alicante existen más de 1500 pacientes en tratamiento con oxigenoterapia, de los cuales alrededor de 350 siguen sistemas móviles para permitir la deambulación, salir a la calle y efectuar una vida lo más autónoma posible. En estos momentos, un total de 40 pacientes entre ambos departamentos están participando en el programa piloto, aunque el objetivo planteado por los centros es que, progresivamente, la gran mayoría de estos pacientes puedan beneficiarse del equipo de medición de oxigenoterapia.
Beneficios de la oxigenoterapia
Cuando se produce un deterioro pulmonar por distintos motivos, uno de los principales es el tabaquismo, se produce un deterioro general del organismo (manifestado en debilidad y fatiga), así como la llamada “insuficiencia respiratoria”. Además de la medicación que pueda suministrarse, junto al cese del hábito tabáquico, puede ser necesario el suministro de oxígeno para compensar este proceso. Así, la oxigenoterapia ha demostrado mejorar la supervivencia, la calidad de vida de los pacientes y restaurar las actividades de la vida diaria.
Por lo que respecta a las fuentes de suministro de oxígeno, hasta hace unos años, los pacientes sólo disponían de bombonas que lo obligaban a permanecer en su domicilio, ya que el tiempo total de tratamiento no debe ser inferior a 15 horas diarias.
Los sistemas han ido evolucionando, mejorando la comodidad, por una parte, y por otra, permitiendo la movilidad. Así, surgieron los concentradores eléctricos, que suministran oxígeno enchufados a la corriente eléctrica, por lo que ya permitieron una movilidad dentro de casa o fuera de ella, siempre que hubiera una fuente de electricidad. Posteriormente, surgió el llamado oxígeno líquido que, a partir de una fuente nodriza fija, permite rellenar una pequeña bombona, utilizada por el paciente para sus desplazamientos, a modo de mochila.
Finalmente, los nuevos concentradores portátiles, con un peso inferior a 1.5 kg, disponen de una pequeña batería que puede recargarse incluso en el mechero del coche, permitiendo una larga autonomía fuera de casa.
