La película ‘Un cuento chino’, rodada en Ciudad de la Luz, ganadora en el festival de cine de Roma

La película ‘Un cuento chino’, rodada en los platós de Ciudad de la Luz, ha sido la gran ganadora de la última edición del Festival de Cine de Roma. La cinta se ha llevado el premio Marco Aurelio del Jurado a la mejor película, y también el Premio del Público, cuya votación se efectúa por Internet. ‘Un cuento chino’ se rodó en el complejo audiovisual alicantino durante el año 2010, y ha cosechado magníficos resultados en la taquilla, entre la crítica especializada y entre el público en general, convirtiéndose en una de las producciones españolas más vistas durante este año.

El director general de Ciudad de la Luz, José Antonio Escrivá, ha destacado ‘la calidad de esta película, una de las grandes sorpresas de la taquilla de este año, y la magnífica interpretación de todo el reparto, especialmente de Ricardo Darin, un verdadero actor talismán’.

Humor negro
La película, dirigida por Sebastián Borensztein es una comedia profunda, emotiva, con altas dosis de humor negro, que narra el fortuito encuentro entre Roberto (Ricardo Darín) y un chino llamado Jun (el actor Huang Sheng Huang) que deambula perdido por la ciudad de Buenos Aires en busca de un tío, su único familiar que tiene vivo.

Roberto se topa con Jun en el momento en que es arrojado a la calle desde el interior de un taxi, luego de haber sido asaltado por el chofer y sus secuaces. A partir de entonces comienza una forzada y extraña convivencia entre ambos, pues Roberto no habla chino y Jun ni una palabra de español. El ermitaño ferretero intenta dejarlo en una comisaría y luego en la embajada de China, pero nadie lo quiere recibir y no tiene más remedio que llevarlo a su casa pues más que su apego a una vida solitaria prima su sentido de la solidaridad,que le impide dejar al oriental abandonado en la calle a su suerte.

Comienza así una convivencia forzada, a la vez que Roberto intenta todo lo que está a su alcance para reubicar a Jun, tentativas que por un motivo u otro fallan, generándose situaciones de mucho humor.

La convivencia entre un occidental y un asiático, matizada por la presencia de Mari (Muriel Santa Ana), una muchacha de campo que se ilusiona con enamorar a Roberto, mostrará que dos hombres muy diferentes, provenientes de las antípodas del mundo y de culturas distintas pueden ser prácticamente almas gemelas unidas por un extraño destino común que ambos ignoran. Y en esta convivencia ambos hallarán el verdadero camino para la resolución de sus vidas.

La película contó con un presupuesto de 3,6 millones de euros. Los premios ahora recibidos impulsarán de nuevo a este largometraje en la taquilla, y le abren nuevas perspectivas de venta en el mercado internacional.