El Jefe de Personal lleva al contencioso-administrativo al concejal de Recursos Humanos
La portavoz del PP de Aldaya, Carmen Jávega, conoció estos hechos tras leer una resolución de la Alcaldía en la que el antiguo Jefe de Personal del Ayuntamiento llevaba un presunto caso de discriminación laboral al tribunal contencioso-administrativo, a causa de la inactividad del Consistorio.
Jávega se informó de los hechos denunciados por el funcionario al leer el expediente en el propio Ayuntamiento y en presencia de dos funcionarios, que es el procedimiento que estableció la alcaldesa a la hora de consultar documentos. Dado el volumen del expediente Jávega solicitó copia del este y los funcionarios la emplazaron a solicitarla por escrito o en el pleno.
Por todo ello, durante la sesión plenaria de ayer, la portavoz popular exigió una copia al concejal afectado que “contestó con muy malas formas y tirando balones fuera” y “nos dijo que nos daría lo que legalmente corresponda, como suelen hacer siempre que les solicitamos cualquier cosa”.
Al parecer el anterior jefe de personal puso el pasado 29 de octubre una reclamación ante el Ayuntamiento porque presentaba un cuadro de depresión a causa de que estaba sufriendo ‘mobbing’ y pedía el cese de las hostigaciones.
El Ayuntamiento tenía seis meses, establecidos por ley, para contestar la reclamación, para lo que designó instructor y secretario del expediente. El actual instructor es el secretario del Ayuntamiento de Navarrés, , un lugar que a priori debería haber ocupado por el secretario del consistorio aldaiero.
En cualquier caso, el consistorio encabezado por Empar Navarro no resolvió el expediente en el plazo establecido y el instructor solicitó una ampliación de seis meses, que el Ayuntamiento le concedió. No obstante, el funcionario afectado por esta presión laborar decidió llevar el asunto por la vía judicial al considerar que el Consistorio dilataba la resolución del expediente de forma innecesaria.
Para Jávega estos “hechos son gravísimos porque la persona que inició el proceso llevaba 20 años trabajando para el Ayuntamiento y era una persona de confianza tanto del actual Equipo de Gobierno como del anterior, y sin embargo acusa al concejal de Recursos Humanos de que le está provocando ‘mobbing’, es decir, que este proceso afecta a dos personas de mucha entidad dentro del Ayuntamiento”.
“Nosotros en otras ocasiones habíamos solicitado información y copias sobre este proceso que está a punto de cumplir un año y nunca nos dieron nada, alegaron que era un tema delicado porque no les interesaba”, señala la portavoz popular.
Vecinos desprotegidos
Por otra parte, el pleno de ayer volvió a darle la razón al Partido Popular, ya que de nuevo la alcaldesa Empar Navarro volvió a “lavarse las manos” frente al caso de una vecina que había sufrido daños por que se le habían colado petardos dentro de su vivienda durante el transcurso de ‘La baixà’ de 2008.
Navarro señaló que lo que tenían que hacer los vecinos era “cerrar las ventanas y las puertas” y que la solución pasaba “por una normativa europea que exige que se marquen los cohetes”. En este sentido, Jávega afirma que “la alcaldesa considera las fiestas del Cristo como municipal cuando le interesa, pero que cuando se le exigen responsabilidades se lava las manos”.
